BIOGRAFÍA:
POEMA:
Nací en Bucaramanga
en el año dos mil en el mes de agosto, me gusta superarme a mí mismo
y estar rodeado de las personas que me importan. En mi tiempo libre
escucho música, dibujo y aunque mi vida es dura sigo adelante con la
frente en alto.
CUENTO:
LA RUTINA DE UN CORAZÓN ROTO
No sé por dónde
empezar, pues mi vida no es como la de los demás, soy un joven que se enamora
con mucha facilidad pero a la vez se ilusiona sin importar el mal que venga por
detrás, pues mi actitud es fría esto no lo puedo negar, aunque mi corazón le
pertenece a esa doncella que me enseñó lo que es amar y a olvidar mi pasado. Me
gusta recordar lo que fui cuando era niño pues aún conservo juguetes que me
enseñaron a creer en la magia y que el mal tiene un final.
Me resulta difícil
expresar lo que siento, pues me da vergüenza decírselo a otra persona, pero al
conocerla solo pienso que ella es la única que el sueño me puede robar, la música
es mi único consuela cuando me siento mal porque gracias a ella me aprendí a
expresar mis sentimientos en una hoja la cual me recuerda que para madurar
tengo que fallar y aprender a resaltar entre los demás sin importar el qué
dirán.
Gracias a esto
viví mi vida normal (pero mi dolor crecía más y más), conocí a dos personas que
nunca creí que me fueran a cambiar, mis hermanos me gusta decirles, eso sí a
uno lo conozco desde mucho antes que el otro, pero a los dos les tengo afecto y
confianza, aunque este primero me entendía mucho más y me sacaba una sonrisa en
cualquier lugar. Al otro no le doy mucha confianza pues su actitud no era de
fiar y era un poco fastidiosa, aunque me demostró que sin importar lo que
pasara o como lo tratara me apoyaría.
Siempre he pensado
que el amor solo hace daño y que para un subnormal como yo (así de grande es mi
pesimismo que me trato a mí mismo así) solo era o más bien es una ilusión.
Conocí a una doncella que me hizo experimentar y olvidar todo lo que dije
atrás, esta fue la primera vez en la que mi mente y mi corazón se unen aunque
lo único que me dijeron fue conquista la, tal fue de real esa sensación que
casi pude oírla cerca de mi oído.
mis amigos,
mencionados anteriormente, me ayudan cada día a conquistar a esa princesa
aunque no los escucho, el segundo me dice lo que quiero escuchar aunque siempre
me estrella con la realidad y el primero me dice frases que pienso todo el
tiempo, pero ya me canse de insistir pues pese a todos mis esfuerzos ella solo
me rechaza y me hace sufrir. A veces pienso por qué las embarro mucho o si
puedo ser el hombre que ella merece, al verme así mis amigos solo se
decepcionan de mi pues solo quieren que siga adelante y que olvide el pasado.
Después de tantos
sufrimientos que pase por ella aun la guardo en mi mente, y por culpa de mi
despecho solo me hago daño a mí mismo, prefiero estar solo y que nadie me ayude
pues así me crié y así moriré, algunos pueden llamarlo masoquismo pero para mí
solo esto es una estúpida rutina.
Ahora tú, si tú,
el que está leyendo esto, de seguro te preguntas que paso conmigo, pues
acércate al baño fíjate en mi cadáver pues eso quedo de mi al escribir y no
resistir perderla como un humilde cobarde. FIN...
Estúpido corazón
No me
importa si eres la única que me habla
O tal vez
la única que me habla
Solo necesito
de la soledad
Pues es la única
que me acompaña
No pido que
pienses en mi
Tampoco que
estés aquí
Porque ni
las rosas más rojas
O las violetas
más azules
Harían que
pensara otra vez en ti.
Nunca me
haz demostrado
Si mi amor
te ha interesaba
Pues nunca
me dijiste
Lo mucho
que me amabas.
Ahora me
despido
Con un corazón
bruscamente destrozado
El cual fue
el único
Que no le importó
si estuviera triste o amargado.
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